~ No he sabido poner las entradas más antiguas al principio de la página... así que para leerlo en orden, de abajo para arriba ~
23 jul 2012
--> Al fin en casa
Cuando hemos llegado a la puerta de mi casa, Ebi y yo hemos estado hablando un poco.
-¿Quieres que vayamos juntos a clase mañana? o... Podemos salir algún día.-Ha propuesto el chico emocionado.
-Estaría bien... sí.- He contestado alegremente.
-¡Qué bien que te guste mi idea!.-Exclamaba el chico mientras acariciaba mi cabello.
-Y... Gracias por acompañarme, Ebi.-He dicho ruborizándome.
Cada vez que pronunciaba su nombre se me venía a la boca ese sabor de las gambas... no podía evitarlo, pero de verdad me daban ganas de darle un mordisco. Por suerte, he sabido contenerme.
-Bueno... y ¿hay alguna razón específica por la que te hayas venido a vivir a Fukui?.-Ha preguntado Ebi dejando su mochila en el suelo. supongo que tendría ganas de que conversáramos un rato más
-Hmmmm...-No sabía qué responder. No podía contarle mis problemas a un chico que apenas conocía.
-¿No la hay?.-Volvió a preguntar Ebi.
-No... (suspiro) Digamos que no...-He respondido al fin.
Tan solo quería que no me hiciera ese tipo de preguntas. Solo conseguía deprimirme.
-Perdona si te ha molestado... Solo quería conocerte mejor. No volverá a suceder.-Ha tranquilizado el chico.
Nada más decir eso, el chico me ha dado un beso en la mejilla. ¿De qué iba? Ha sido algo... raro. No me lo esperaba.
-¡EBI!.-He gritado.
El chico me ha mirado extrañado, pero no he sabido qué decirle. Estaba demasiado sorprendido.
-¿También te ha molestado eso? No era mi intención, Tsukioka...-Se ha excusado el chico apartándose de mí.-Creo que te he cogido confianza demasiado rápido.
-No... es eso.-He contestado negando con la cabeza.
Si cuando digo que soy un idiota es porque SOY UN IDIOTA!! ¿Por qué reacciono de ese modo siempre?
No puedo decir que no me haya gustado...
-Perdona, Ebi...-Me he disculpado al fin sin poder mirarle a los ojos.
-No... pasa nada. Mañana te vengo a buscar. ¿Sí?.-Ha contestado en un tono completamente diferente. Esta vez estaba super animado.
-¡Sí, claro!.-He exclamado con una sonrisa mientras recogía su mochila del suelo y se la ofrecía.
Ebi ha tomado su pertenencia y se ha ido sin decir nada más. Mientras se alejaba, he podido comprobar cómo se giraba un par de veces mirando atrás. Le he hecho un gesto con la mano, hasta que al final ha desaparecido al cruzar la esquina de la calle.
/Otro dibujillo. Me dan ganas de llevarme a Ebi a casita conmigo *¬*/
Suscribirse a:
Entradas (Atom)